Fachada de la tienda Forbidden Planet |
Otra parada cercana para los coleccionistas suele ser Orbital
comics, en Great Newport Street. Sin olvidarnos de los Toysrus, donde siempre
puedes comprar cosas interesantes.
Fachada y entrada al Museo |
Si dejamos las compras de lado, hay otra visita muy interesante para los coleccionistas de figuras y juguetes en general: el Museo de la infancia – Victoria and Albert Museum of Childhood.
Su localización no es céntrica (está en la zona tarifaria 2
de transporte, a una parada de Liverpool Street) pero está en la línea roja de
metro, que sí recorre zonas muy visitadas.
Su visita es gratuita, así como todas sus actividades,
aunque estas suelen estar orientadas a un público infantil o familiar. Toma
nota de que si vas con niños, te costará sacarles de allí porque tendrán bastantes
cosas con las que jugar y ver.
El museo se ubica en un edificio de estilo victoriano
construido en 1872 y forma parte del Museo Victoria & Albert, de arte y
diseño. Tiene 4 plantas, pero la exposición permanente es lo primero que se ve
al entrar. Hay una planta inferior con aseos y servicios como sala de descanso
para bebés y lactancia. Las dos plantas superiores son más interactivas para
actividades infantiles.
La exposición se ubica en dos galerías. Una que llaman de
Juguetes en Movimiento y se divide en 4 zonas: empuja y tira, resortes y
engranajes, circuitos y motores y mira. Enfrente de esta galería se encuentra
la galería de creatividad dividida en las zonas: haz que pase, explora, la zona
de inspiración y la de imaginación. Y uniendo ambas los teatros de marionetas.
Y estos mismos son los temas en los que se organiza la exposición.
Zona de maquetas, con Stonegenge en primer plano |
Es llamativo ver que en una época como los 80, donde la
globalización no parecía tan global, los niños disponíamos de juguetes muy
parecidos a uno y otro lado del Canal de la Mancha.
Volviendo a las figuras de acción, la zona que más me gustó
fue la comentada vitrina dedicada a las Action Force. En ella se encuentra un espléndido
diorama con figuras y vehículos de aire, tierra y mar muy bien integrados.
Vemos un helicóptero Fang en lo alto de un edificio, paracaidistas descendiendo
por el cielo, vehículos de tierra rodeando la casa y dos lanchas y un submarino
en la cala. Un estupendo anuncio gigante que haría las delicias de los niños
que lo vieron.
Con menos espectacularidad encontramos expuestas figuras y naves de Star Wars, superhéroes y Master del Universo. Un par de Scalextric y trenes que te tienen entretenido mucho rato. Todo tipo de juguetes de construcción y movimiento y una zona con zootropos (ahí he descubierto el nombre de esta caja que al girarla produce la sensación de que los dibujos se mueven) y linternas para jugar junto a una muestra de la evolución de las consolas.
Sin olvidar las muñecas. De trapo, peluche, Barbies y muñecas repollo. Sólo eché en falta mis queridas Barriguitas, que se ve que no llegaron a ser vendidas en Reino Unido.
Desde siempre nos han gustado los disfraces |
Zootropo y cinexin |
El museo cuenta con una colección de más de 100 casas de muñecas. Muchas de ellas las encontramos en la zona dedicada a ellas de la exposición. Y en su web podemos descubrir las características y detalles de su creación y llegada al Museo.
No es el único tema documentado. En sus archivos, que se
pueden visitar previa solicitud de autorización, se encuentran datos de la
mayoría de fabricantes de Reino Unido. También se pueden ver los catálogos de
cientos de tiendas y distribuidores desde 1915, como es el caso de Hamleys, o
desde 1986 los de Toysrus.
Y para los niños tienen préstamos de materiales y varios
puntos interactivos. Desde caballitos de madera en los que galopar hasta una
mesa de dibujo con imanes.
Como veis, un buen lugar donde pasar unas horas rememorando nuestros juegos.
Como veis, un buen lugar donde pasar unas horas rememorando nuestros juegos.